¿En qué consiste una ecografía intestinal?
Una ecografía intestinal es un examen médico necesario para descartar las sospechas de algunas enfermedades, entre ellas, la enfermedad de Crohn. Si bien existen otros exámenes para evaluar el estado del tubo digestivo, esta clase de ecografía puede ser esencial para evitar pruebas más invasivas.
Se trata de un estudio enfocado en el tracto digestivo. Gracias a un transductor con altísima resolución, el médico o sonografista puede observar las paredes intestinales. Con esta prueba se busca algún tipo de inflamación anormal, ya sea en las capas del tracto gastrointestinal, en el colon o en los intestinos.
Diferencias entre una ecografía intestinal y otras pruebas
Es posible que se pueda confundir la ecografía intestinal con algunas otras pruebas centradas en esta parte del cuerpo humano. No obstante, se debe tener en cuenta que la ecografía intestinal es un examen vital y específico que funciona perfectamente en el diagnóstico de enfermedades.
Diferencia con una ecografía abdominal
La ecografía abdominal, a diferencia de la intestinal, busca observar los órganos dentro del abdomen, como el hígado, los riñones y el páncreas. Se utiliza este tipo de estudio para diagnosticar tumores, infecciones renales, cálculos en la vesícula o cualquier inflamación extraña.
Así, se pueden detectar enfermedades como apendicitis, pancreatitis, cálculos biliares y cirrosis. Es decir, es un examen que, dependiendo de la dolencia del paciente, no se centra en un órgano o parte del cuerpo específico.
Diferencia con una colonoscopia
Una colonoscopia es un examen que busca anomalías en el intestino grueso (el colon) y en el recto. Dicha prueba se realiza mediante una sonda maleable con una pequeña cámara en su extremo que se introduce por esa área del cuerpo.
Esto permite al médico ver el estado de los órganos ya mencionados. Se prescribe especialmente para hacer biopsias. En contraste con la ecografía intestinal, este es un examen más invasivo para el paciente.
Otra diferencia que hay que acotar entre estas pruebas mencionadas y la ecografía es el precio ecografía intestinal. Al no requerir de preparaciones previas más que el ayuno, y al no requerir de rayos X, suele ser más económica. A pesar de ello, siempre es valioso llamar a tu centro médico de confianza para asegurarse.
Algunas enfermedades que pueden detectarse con una ecografía intestinal
El objetivo de una ecografía intestinal es poder detectar algún tipo de enfermedad del tracto gastrointestinal. Pero, ¿cuáles serían algunas de las enfermedades que pueden descubrirse gracias a este estudio? Podrían ser varias:
- Tumores mesenquimales y linfomas. Tumores gastrointestinales de 1% y del 2% al 4%, respectivamente. Los primeros suelen tener la misma probabilidad de ser malignos o benignos.
- Tumores metastásicos. Son aquellos que han llegado al tubo digestivo a través del melanoma maligno de cánceres como el de mama o el de pulmón. Suele afectar especialmente al estómago.
- Enfermedad de Crohn. Es una enfermedad inflamatoria que afecta al colon y a las capas del tubo digestivo. Se pueden encontrar úlceras o fístulas, al igual que la rigidez, estrechamiento y engrosamiento de las paredes digestivas. Si deseas leer más sobre la ecografía en esta enfermedad, te invitamos a leer este artículo.
Como se observa, este estudio puede detectar algunos tumores y enfermedades inflamatorias que pueden desestabilizar la calidad de vida del paciente. Por ello, esta prueba es el primer método diagnóstico si se observa alguna irregularidad en el abdomen o algún malestar estomacal.
¿Qué precio tiene una ecografía intestinal?
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